jueves, 28 de abril de 2011

CUANDO MUERE UN SER QUERIDO‏


Por: Trini Fernández

Cuando se pierde a un ser querido, es normal sentirse afligido, y no tiene nada de malo exteriorizarlo. Pero hay otras preguntas que requieren una respuesta: '¿Cómo puedo sobrellevar el dolor? ¿Es normal tener sentimientos de culpa y de ira? ¿Cómo puedo dominarlos? ¿Qué puede ayudarme a superar la pérdida y el pesar?'.

Manifieste su dolor. Y tienen razón, porque hacerlo sirve de desahogo. Dar libre curso a los sentimientos puede aliviar la tensión que se siente. La expresión natural de las emociones, acompañada de comprensión y de información precisa, le permitirá ver sus sentimientos desde una perspectiva correcta.

Una forma de desahogarse es hablando.Comunicar sus sentimientos de palabra o por escrito contribuirá a mitigar su dolor.


Es posible que durante algún tiempo sus emociones sean un tanto impredecibles. Quizás se le salten las lágrimas cuando menos se lo espere.
Algunos experimentamos sentimientos de culpa tras la pérdida de alguien querido. A veces creemos que algún descuido contribuyó a la muerte de la persona a quien queríamos. Puede servir de ayuda pensar que los sentimientos de culpa —sea esta real o imaginaria— son una reacción normal de aflicción. Y tampoco estos sentimientos deben reprimirse necesariamente. Si habla de la culpa que siente, es probable que encuentre gran alivio.
Debemos comprender que, por mucho que amemos a una persona, no podemos controlar su vida ni evitar que "el tiempo y el suceso imprevisto" le acaezcan. (Eclesiastés 9:11.)
Como sobrellevar el dolor.
1. Ayuda de parte de Dios
La Biblia nos asegura: "Jehová está cerca de los que están quebrantados de corazón; y salva a los que están aplastados en espíritu". (Salmo 34:18.) En efecto, una relación con Dios le puede ayudar, más que cualquier otra cosa, a sobreponerse a la muerte de un ser querido.
Por otra parte, nunca subestime el valor de la oración. La Biblia nos exhorta: "Arroja tu carga sobre Jehová mismo, y él mismo te sustentará". (Salmo 55:22.) Si hablar de sus sentimientos con un amigo comprensivo le puede ayudar, ¡cuánto más le ayudará abrir su corazón al "Dios de todo consuelo"! (2 Corintios 1:3.)
2. Confíe en los amigos: Deje que los demás le ayuden si se ofrecen y si su ayuda le puede resultar útil.
3.-Cuide su salud: La aflicción puede causarle un gran desgaste, sobre todo al principio. Su cuerpo necesita más que nunca descanso suficiente, ejercicio sano y una alimentación adecuada.
4.- Aplace las decisiones importantes.
5.- Sea paciente consigo mismo: La aflicción normalmente dura más de lo que la mayoría de la gente cree. Las fechas que traen recuerdos de la persona querida muerta reavivan el dolor año tras año. Determinadas fotografías, canciones o incluso olores pueden hacer saltar las lágrimas.
6.- Sea comprensivo con los demás: Trate de ser paciente con los demás. Comprenda que la situación es embarazosa para ellos. (Colosenses 3:12, 13.)
7.- Absténgase de ingerir medicamentos o alcohol para contrarrestar la pena:
8.- Vuelva a su actividad diaria: Al principio tal vez tenga que hacer un esfuerzo para ir a trabajar, ir de compras o realizar otras tareas.
9.- No tema que le desaparezca el dolor intenso: Por extraño que parezca, algunos dolientes temen dejar de sentir un pesar profundo, pues creen que ello indicaría que su amor por el fallecido está disminuyendo. No es así. La desaparición del dolor da paso a recuerdos valiosos que sin duda conservará para siempre. (Eclesiastés 3:1, 4.)
10.- No se inquiete excesivamente: Puede que se pregunte: '¿Qué va a ser de mí?'. La Biblia aconseja que no nos preocupemos por el día siguiente. "Vivir concentrándome más en el día presente me ayuda mucho"(Mateo 6:25-34.)

No hay comentarios:

Publicar un comentario