No estamos solos los que nos oponemos a una posible invasión de Siria
por parte de Estados Unidos. Un sondeo auspiciado por importantes medios
nacionales muestra que la gran mayoría de los norteamericanos no está de
acuerdo con las intenciones de Barack Obama. El pueblo estadounidense que es
esencialmente inteligente, pacifista, trabajador y solidario, sabe de más que a
LOS DIRIGENTES les importa un bledo la suerte de los millones de sirios que
están en medio de una desgraciada guerra civil, entre un gobierno cruel,
corrupto y criminal y una oposición dividida y supuestamente permeada por
grupos nada confiables. Cualquier decisión para mediar en éste delicado
conflicto, deberá emanar de la legalidad y la neutralidad que se supone
representa la Organización de las Naciones Unidas (O N U), de lo contrario nos
veremos arrastrados a otro conflicto bélico de consecuencias impredecibles.
Por: Jonathan Núñez
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