Estamos
viviendo en un tiempo donde la velocidad
conduce nuestro camino y el reloj domina
cada vez mas nuestra vida, las personas
viven sofocados y solo le interesa una cosa que enlaza a muchas, el dinero,
este que no es del todo malo y difiero con muchos porque” el dinero es más
positivo que negativo” sin embargo no es
el más importante, ya que existe un ente que sin conocerlo, sin verlo,
conociendo quizás una mínima parte de quien es…actuamos como si fuera de la
familia, más aun, es considerado el personaje de mayor respeto en todo el mundo
“DIOS”.
El punto de
este articulo que escribo es que definitivamente el tiempo es el gerente de
nuestra vida y por tanto hay que tratar de saber manejarlo, porque él no se
detiene, mantiene su ritmo sin importar lo que pase, a él no le importa si eres
joven o viejo, si eres saludable o enfermo…NADA DE ESO LE COMPETE AL TIEMPO, NO
HAY QUIEN LO DETENGA!
Ahora bien,
sabemos que no hay quien detenga a este fenómeno natural, entonces que debemos
de hacer para contrarrestarlo?
Cuando no
puedes con tu enemigo, hazte su amigo; Debemos de mantener el ritmo, no
esperando que los tiempos se acomoden a nosotros, sino nosotros acomodarnos al
tiempo, aprovecharlo cada segundo en lo que te haga sentir bien a ti y a la mayoría
que te rodea, tomando en cuenta aquellos aspectos simple como… Un te quiero a
tus padres, un abrazo a tus amigos, una respuesta de aliento.
Sin embargo
dejamos que el tiempo se nos valla encima y cuando volteamos a mirar a nuestro
alrededor nos arrepentimos, un arrepentimiento
doloroso y en ocasiones indefinido. Cada etapa es diferente, por ende irrepetible
es por ello que te aconsejo que apagues el motor de robot automático al que te
has acostumbrado y que actúe de forma estándar para que el tiempo no tome la delantera y puedas ir a la par con
él.
Por:
Jonathan Núñez
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