martes, 6 de julio de 2010
Lavando Oro,Cuando no Hay Trabajos en Baitoa
Baitoa 06 Julio 2010
Por: Junior Saviñón
La falta de oportunidades de trabajos que experimentan muchas personas en Baitoa, constituye una serie de consecuencias negativas para el bienestar y desarrollo de la población. Para aquellos que no tuvieron la posibilidad de poder asistir a universidades, esta situación ha conllevado que las personas con menor nivel académico tengan que realizar todo tipo de trabajos, para poder sobrevivir.
Una actividad de trabajo informal que está teniendo mucho auge y que se ha convertido de mucha importancia para algunos moradores de este pueblo es ‘’Lavar Oro’’ en las tierras del río Yaque del norte. Decenas de personas a diario se trasladan de diferentes partes de este distrito, para lavar tierras y conseguir partículas diminutas de oro. Las pequeñas partículas de ese preciado y codiciado mineral, son almacenadas por los lavadores hasta tener ciertas cantidades en las que puedan reunir gramos de ese mineral.
Haciendo historia de lo que ha sido lavar tierras en este pueblo, se remonta a cientos de años, cuando los habitantes que estaban próximos a los arroyos y al río Yaque del Norte, usaban esta actividad como forma de ganarse la vida y de esa forma con el dinero obtenido de las ventas del oro podían hacer compras de alimentos y artículos para el hogar.
Los hombres y mujeres que realizan este tipo de trabajo, suelen realizarlo cinco días a la semana, principalmente en aquellos momentos en los cuales que las temporadas de trabajos se reducen en Baitoa. El método a utilizar para lavar tierras, consiste en escarbar con las manos, sin auxilio de ningún instrumento, en la zona donde van a sacar la tierra para lavar, a orillas del río o arroyo; en caso de que el río sea grande, buscan alguna orilla para escarbar la tierra, aflojando y removiendo las piedras grandes para aprovechar la tierra que se mueve; la tierra de la excavación la echan en una batea colocada a flor de agua, donde le dan un movimiento de rotación especial, de manera que todo desaparece de su fondo con el agua que entra, menos la arenilla y las laminitas de oro que van recogiendo en un potecito, sin embargo cuando la arena está bien seca, comienzan a soplarla sobre una hoja lisa a fin de tomar alguna lámina. Hay que destacar que esos lavadores de tierras son muy diestros al soplar y solo eliminar la arenilla que queda, haciendo un movimiento de rotación sin que se salgan las partículas diminutas de oro.
Otro de los métodos que se utiliza para lavar oro, consiste en sumergirse al fondo con una piedra en la espalda hasta llegar al fondo del río, trayendo a la superficie una batea llena de tierra en donde esta se lava en la superficie con el movimiento de rotación de la batea y si tiene suerte encuentran esas pepitas de oro.
Este tipo de trabajo requiere de una serie de actitudes positivas, así mismo ha sido una actividad realizada por mujeres, pero que en los últimos años en nuestro pueblo, los hombres se están dedicando ese tipo de trabajo, para invertir su tiempo y no quedarse lamentando los problemas de las faltas de dinero que tienen tantas familias.
Las personas pueden llegar a juntar gramos de oro, cuyo precio en el mercado se cotiza a más de $RD 1500.00 en el mercado. Cuando usted cruce por el río Yaque del Norte en la zona de Baitoa, no se sorprenda cuando observe varias personas allí, es que son los lavadores de oro que días tras días realizan dicha actividad para ganarse el pan de cada día.
Fotos: Jean Carlos Collado
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