George Steinbrenner, el tan polémico como exitoso dueño de los New York Yankees, murió hoy de un infarto en Tampa, Florida, una semana después de cumplir los 80 años, según informaron el club de béisbol y la familia del directivo.
"Es con profunda tristeza que la familia de George M. Steinbrenner III anuncia su deceso", indicó un comunicado.
"Era un hombre increíble y generoso (...) Un visionario y un gigante en el mundo de los deportes. Se hizo cargo de un equipo grande pero en problemas y lo volvió a convertir en campeón".
Steinbrenner era una de las figuras más conocidas, amadas y odiadas del béisbol estadounidense. También el propietario con más tiempo a cargo de un equipo de la Major League de béisbol estadounidense.
Estaba al frente del equipo desde hacía 37 años. "Es un día triste no sólo para los seguidores de los Yankees, sino también para toda la ciudad", dijo el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg.
"Poca gente tuvo más impacto en Nueva York durante las últimas cuatro décadas que George Steinbrenner". El directivo invirtió 8,7 millones de dólares en 1973 para hacerse con el equipo, que atravesaba una fuerte crisis.
Bajo su mandato, los Yankees renacieron y ganaron siete trofeos de la Serie Mundial, el último de ellos en 2009. Conocido también como "The Boss" (el jefe) por su riguroso estilo de conducción, acaparó en su carrera tantos titulares como su equipo.
Diversas peleas con otros personajes del béisbol y controversias como la que generó por pagar demasiado a los jugadores -equipos más modestos lo acusaron de provocar una inflación generalizada en los salarios- se compensaron con los éxitos del equipo.
"Ser dueño de los Yankees es como ser dueño de la 'Mona Lisa'", señaló en una ocasión. Steinbrenner nació el 4 de julio de 1930 en Rocky River, Ohio. Amasó una fortuna con el negocio familiar de la construcción naval.
Una de sus últimas iniciativas fue construir un nuevo estadio para los Yankees que abrió sus puertas a principios de la temporada 2009.
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